Porque por algo es asi.Todo sucede por algo. La mariposa recordará por siempre, que fue gusano.
LA MARIPOSA RECORDARÁ POR SIEMPRE,QUE FUE GUSANO.
Mario Benedetti.
jueves, 21 de noviembre de 2013
Comienzo,me importa un pito:
NO SE ME IMPORTA UN PITO
No se me importa un pito que las mujeres
tengan los senos como magnolias o como pasas de higo;
un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy una importancia igual a cero,
al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco
o con un aliento insecticida.
Soy perfectamente capaz de soportarles
una nariz que sacaría el primer premio
en una exposición de zanahorias;
¡pero eso sí! -y en esto soy irreductible- no les perdono,
bajo ningún pretexto, que no sepan volar.
Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!
Ésta fue -y no otra- la razón de que me enamorase,
tan locamente, de María Luisa.
¿Qué me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos?
¿Qué me importaban sus extremidades de palmípedo
y sus miradas de pronóstico reservado?
¡María Luisa era una verdadera pluma!
Desde el amanecer volaba del dormitorio a la cocina,
volaba del comedor a la despensa.
Volando me preparaba el baño, la camisa.
Volando realizaba sus compras, sus quehaceres...
¡Con qué impaciencia yo esperaba que volviese, volando,
de algún paseo por los alrededores!
Allí lejos, perdido entre las nubes, un puntito rosado.
"¡María Luisa! ¡María Luisa!"... y a los pocos segundos,
ya me abrazaba con sus piernas de pluma,
para llevarme, volando, a cualquier parte.
Durante kilómetros de silencio planeábamos una caricia
que nos aproximaba al paraíso;
durante horas enteras nos anidábamos en una nube,
como dos ángeles, y de repente,
en tirabuzón, en hoja muerta,
el aterrizaje forzoso de un espasmo.
¡Qué delicia la de tener una mujer tan ligera...,
aunque nos haga ver, de vez en cuando, las estrellas!
¡Que voluptuosidad la de pasarse los días entre las nubes...
la de pasarse las noches de un solo vuelo!
Después de conocer una mujer etérea,
¿puede brindarnos alguna clase de atractivos una mujer terrestre?
¿Verdad que no hay diferencia sustancial
entre vivir con una vaca o con una mujer
que tenga las nalgas a setenta y ocho centímetros del suelo?
Yo, por lo menos, soy incapaz de comprender
la seducción de una mujer pedestre,
y por más empeño que ponga en concebirlo,
no me es posible ni tan siquiera imaginar
que pueda hacerse el amor más que volando.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Como cuando el silencio es posible
ResponderEliminary las palabras empiezan a temblar.
No puedo contestar ,no permite tu blog,saludos.
EliminarEl silencio se teme cuando se conoce,las miradas tiemblan sin conocer.
ResponderEliminarHola!!! Cary
ResponderEliminarMe quiero imaginar
Qué viste El lado oscuro del corazón 2 no..?
No Daniel,sabes que no?.Nunca la termino de bajr,fanática de la primera,de ahí esto que improviso.Duele tanto y lloro siempre cuando leo y veo.Comprendo ahora cuando alguien se le para los pelitos por algo.Tengo miedo de ver,no se como termina y no me gustan los finales tristes.Es triste?.
EliminarNo, es hermosa!!!
ResponderEliminarEs para verla tantas veces...
Al pie de mi blog hay una parte de ella mírala
y quedarás impregnada de ella,
Gracias Daniel,entonces me animo,abrazo grande.Tengo que seguir copiando y no tuve tiempo,muy buen fin de semana,
EliminarSi, Cary... De Santa es el muelle.
EliminarAbrazo grande.